Cobarde entre los cobardes
Detienes el golpe atemorizado
Tienes miedo de verte derrotado por la suerte
¿Qué esperas que no lo sueltas?
¿Qué no sientes en las venas el galope de la fiera que vengarse espera?
Golpea, que la vida no espera, enviste su fuerza contra ti golpe a golpe, tristeza a tristeza, libra tus fuerzas internas y externas, que no vea que ellas flaquean, si lanza un embate fortuito disfrazado de accidental fracaso: no temas, tu casta de héroe lanzara la fiera que venga tu suerte, la que honra tu nombre y levanta tu frente y dice sonriente...
así sea.
Golpea, que la vida no espera.
Golpea.
Rodrigo Aparicio
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